NÍJAR / Almería – El pasado sábado 22 de mayo, sobre las 23:30 h de la noche se produjo un incendio, al parecer intencionado, en el asentamiento chabolista de trabajadores del campo conocido como Walili, junto a la carretera a San José, en el término municipal de Níjar. El incendio ha dejado sin “vivienda” a cerca de 300 personas y dos heridos por quemaduras graves, uno de los cuales ha tenido que ser trasladado a Granada. Durante la mañana han acudido diferentes ONG para ver qué había sucedido y prestar la ayuda de urgencia necesaria. “Por el asentamiento sólo han aparecido las ONG, las administraciones públicas no han aparecido por allí para nada, es muy cómodo estar a gusto y seco en casa viendo la lluvia por la ventana, mientras que cientos de trabajadores migrantes se mojan a la intemperie después de perderlo todo” ha sentenciado el diputado andaluz Diego Crespo después de acercarse por la mañana al asentamiento. El asentamiento dl Walili es uno de los más grandes de Almería, contaba aproximadamente con una población de 800 personas. La Guardia Civil ha hecho dos detenciones sospechosas de haber iniciado el fuego.
A la mañana siguiente del incendio, una tormenta de agua azotó la comarca, sin que desde el Ayuntamiento o la Junta tomaran ninguna medida de auxilio a los afectados. Sorprendentemente el pasado miércoles, un tractor realizó profundos surcos en el terreno arrasado para impedir el retorno de los residentes afectados. Días después, el viernes por la mañana, encontramos a la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez, junto a otros miembros del Consistorio en los aledaños del poblado: la pala seguía levantando el suelo del asentamiento incendiado.